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En la sala del Senado aprobamos y despachamos a ley el proyecto que permite al Ministerio de Obras Públicas, directamente o a través del sistema de concesiones, construir plantas desaladoras cuyo principal propósito sea el consumo humano, pero también tenga fines productivos; por ejemplo, para el riego que requiere la agricultura, para la minería o alguna otra actividad económica.

Desde la vía legislativa estamos aportando en soluciones para el mayor problema que tiene nuestra región, debido a una sequía que se origina en la ausencia prologada de precipitaciones, el aumento de temperaturas, el agotamiento de fuentes de abastecimiento de agua que mantienen hoy el riesgo de racionamiento en las ciudades, la permanente dependencia de camiones aljibes en localidades rurales y el no poder regar zonas agrícolas, a pesar de que son suelos de buena calidad.

A partir de la aprobación de este proyecto superamos un obstáculo legal que había sido representado por la Contraloría,que impedía que el Ministerio de Obras Públicas pudiera construir plantas desaladoras cuyo principal propósito no fuera el riego, sino que el consumo humano. Este proyecto de ley lo permite, cumpliendo un compromiso que asumimos con la región de Coquimbo, que asumió también la Ministra de Obras Publicas en sesión de la Comisión del Senado que realizamos en la región, y que comprometió el Presidente de la Repúblicahace unos meses en la comuna de Río Hurtado.

El uso de agua de mar desalada ya sea para el consumo humano y las actividades productivas está ampliamente extendido en el mundo. En Israel, por ejemplo, el 85% del agua  que consume la población corresponde a agua de mar transformada en agua potable a partir de plantas desaladoras; y nuestra región es la única del norte de Chile que hoy no cuenta con este sistema.

Ahora, a partir de esta nueva ley, no podrá haber excusa alguna (ademas considerando el cambio de opinión de autoridades que hace unos años no estaban convencidas) para llevar adelante una o más plantas desaladoras, esperamos, en las tres provincias de la región de Coquimbo.